La imagen titular y única de nuestra cofradía es el Santísimo Cristo de Los                   Favores, tallado en madera y de tamaño natural. Se trata de un crucificado de             tres clavos(sobre las palmas de la mano y la reunión de sus pies estando el                 empeine derecho por encima del izquierdo). Su cabeza está inclinada hacia el               frente y descansando sobre su pecho. Sus ojos se encuentran semicerrados y               la boca entreabierta. El pelo ligeramente ondulado, con la raya en el centro,                 cae a ambos lados de su rostro, llegando por su lado derecho un mechón                     hasta la altura del comienzo de la axila y por su lado izquierdo este cae hacia               atrás( por la espalda ). Sus brazos no tienden a la horizontalidad, sino que                   forman ángulo con su cuerpo. Sobre su costado derecho tiene la herida de la               lanzada de la que brota sangre, al igual que sobre su rostro, sus rodillas y                   sobre sus pies.

El paño de pureza, anudado a su izquierda, es corto, con plieges suaves y                   amplios, dejando al descubierto, prácticamente la totalidad de sus piernas.

 

 

Su corona está compuesta de dos ramas de espinas entrelazadas de manera helicoidal y detalle de la Cara.

Está clavado sobre una cruz latina de sección cuadrangular, rematada en sus               extremos por unos adornos de metal en color plata imitando a granadas,                   teniendo el superior la inscripción INRI también en plata. Los remates                         originales eran de madera policromada en plata y fueron sustituidos por los                     actuales, durante la restauración que se realizó en 2000-2001.

 

Su autor es el maestro granadino Nicolás Prados López, data de 1944,                           constituyendo un ejemplo de la imaginería granadina de los años 40. Por                       expreso deseo de la cofradía homónima de Granada que lo mandó tallar, es la más fiel reproducción que existe, de la imagen pétrea que se encuentra en el Campo del Principe de Granada.

 

En su origen era de color blanco a imitación de la piedra.

 

Fué procesionada en Granada entre 1944 y 1947.

 

Una vez adquirida, en 1949, y antes de ser trasladada a Loja, fue policromada( desconocemos por quien, aunque muy problablemente fuese por el propio Nicolás Prados López, ya que también es el autor del altar en el que se encuentra actualmente )para ocultar su aspecto pétreo, el cuál se ha podido comprobar en las posteriores restauraciones que se ha realizado a la imagen. En la actualidad, su policromado presenta ligeros tonos verdosos a modo de reflejos por todo el cuerpo, siendo más visibles en su rostro y concretamente alrededor de sus ojos.

 

El Trono

El Trono está tallado en madera de pino rojo y dorado en oro bajo,                             mientras que las partes lisas son de caoba en su color. Su largo es de 2,70 mts. por 2,50 mts. de ancho, independientemente de los 5 brazos ó barales de los que consta.

Se trata de un trono de dos alturas, de forma rectangular, en la parte                         superior forma un Calvario rodeado de una verja, donde va insertada la                       imagen. Mezcla los colores dorado en las partes talladas y caoba en las partes lisas. En el frontal tiene tallado un medallón con el escudo de los reinos de España, en la parte trasera otro con el escudo de Loja y en los laterales destacan otros con escenas de la Pasión( a su derecha Jesus orando y a su izquierda, María al pié de la cruz), todos ellos pintados al óleo por Encarnación Godoy. Cuatro faroles de luz artificial, de un sólo pie, en madera tallada y policromada, fijados en las esquinas del cuerpo superior del trono, completan y alumbran el conjunto.

Es portado a hombros por 18 horquilleros bajo las órdenes de un postor.

Fué diseñado y realizado por el maestro lojeño D. José Alguacil Daza entre 1956-57.